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Según el estudio 2018 State of the Cloud de RightScale, cerca del 81% de las empresas utilizan un promedio de cinco servicios cloud paralelamente, entre ellos, el cloud storage para guardar sus archivos en la nube.
La posibilidad almacenar información en la nube se ha consolidado como una opción popular debido al gran valor que aporta. Sin embargo, es necesaria una gestión cuidadosa de los datos más allá del cloud. Esto con el fin de reducir el impacto de posibles incidentes.
¿Por qué almacenar archivos en la nube?
La seguridad de la información y de los datos manejados por las empresa es de extrema prioridad. Las buenas prácticas tradicionales como las copias de seguridad físicas, la gestión de contraseñas y el cifrado de información no son suficientes frente a ciertos riesgos de seguridad. Algunos, por ejemplo, son:
- Ataques cibernéticos: como ransomware, mediante los cuales toda la información puede ser secuestrada por criminales.
- Fallos en el hardware: estos pueden afectar tanto a los discos duros que contienen la información como a las copias de respaldo.
- Desastres naturales: como incendios, inundaciones o terremotos, los cuales pueden poner en peligro de la misma manera a los dispositivos y soportes con la información almacenada.
- Robos físicos de dispositivos: los centros físicos de datos pueden ser el objetivo de delincuentes que deseen infiltrarse para sustraer equipos con información valiosa.
- Amenazas internas a la empresa: empleados que voluntariamente destruyen o sustraen información o incurren en intentos de sabotajes.
- Error humano: el margen de error humano nunca se debe menospreciar, pues a menudo la distracción, el desconocimiento o la falta de experiencia en el personal interno resulta ser la amenaza más común.
Bajo este contexto de riesgos y amenazas, migrar el almacenamiento de los archivos hacia la nube es una de las mejores medidas que una empresa pueda implementar.
El almacenamiento cloud le otorga a las organizaciones un alto nivel de seguridad y disponibilidad de toda su información. Lo cual les permite anticiparse de manera efectiva a cualquiera de los riesgos mencionados anteriormente.
¿Cómo almacenar archivos en la nube?
Existen distintas formas de almacenar los archivos en la nube, aunque no todas proporcionan los mismos niveles de seguridad, disponibilidad y versatilidad. Para seleccionar cualquier modelo de almacenamiento cloud es necesario estudiar previamente sus diversas características y el objetivo que se desea cumplir al migrar la información.
Guardar los datos en la nube se puede realizar mediante múltiples procedimientos y metodologías. Algunas más complejas que otras según la robusticidad y naturaleza de la información. Sin embargo, existen dos formas generales para realizar el almacenamiento. Estas son:
Cloud storage
Consiste en el almacenamiento sincronizado en la nube. Este modelo permite tener un acceso constante a la información, así como también compartirla, modificarla o eliminarla. El objetivo de esta modalidad es almacenar datos que la empresa utilice día a día.
Este servicio es muy cómodo y ágil. Sin embargo, se deben tomar previsiones extras al utilizarlo. Esto con el fin de reducir al máximo el margen de error humano y evitar los accesos no deseados.
Los proveedores de cloud storage suelen permitir la administración de “perfiles de usuarios”. Mediante ellos se limita el control que cada usuario puede ejercer sobre la información almacenada.
Cloud backup
Los backups, copias de seguridad o copias de respaldo en la nube consisten en duplicar y resguardar información específica.
Esta modalidad se caracteriza por estar orientada a datos de uso poco frecuente. Pues el objetivo es poder resguardarlos por largos periodos de tiempo y evitar que múltiples usuarios estén consultando dicha información constantemente.
¿Cómo hacer para no perder los archivos en la nube?
La nube representa un aliado más para salvaguardar los datos de las organizaciones. Ella aporta no solo seguridad sino también agilidad y versatilidad. No obstante, la seguridad es uno de los elementos más críticos y preocupantes.
Las mejores prácticas para aumentar la seguridad de los archivos en la nube son las siguientes:
- Complementar las copias de seguridad en la nube con copias en soportes físicos, además ubicados en distintos lugares.
- Evaluar las capacidades del proveedor del servicio cloud en cuanto a redundancia de la información y de recuperación ante desastres.
- Cumplir con las obligaciones en término de encriptación y de frecuencia de los respaldos introducidas por el nuevo Reglamento General de Protección de Datos (GDPR).
- Cumplir con principios básicos de seguridad evitando el acceso a estos servicios en la nube desde ordenadores públicos o a través de redes WiFi públicas.
- Restringir el control hacia la información que tienen los distintos usuarios dentro de la organización.
- Contar con un experto en cloud computing dentro de la empresa. El traslado de servicios y aplicaciones a la nube no exime el control por parte de un responsable de TI.
Las responsabilidades del almacenamiento en la nube son compartidas entre la empresa y el proveedor del servicio cloud. De hecho, este último es el encargado de la seguridad tanto física como informática del datacenter.
Por estos motivos, es necesario definir de forma conjunta y cuidadosa los procesos de migración y las políticas de contratación. Además, mientras mejor reputación tenga el proveedor del servicio, más confianza puede sentir la empresa contratante. Por ello es de vital importancia elegir al mejor proveedor de servicios cloud.
